VIOLENCIA POLÍTICA DE GÉNERO
En unas horas será una fecha que todos disfrutamos en familia, una fecha de celebración, comida, familia y alcohol. Les deseo a todos felices fiestas.
Esta semana hubo algo que me pareció realmente relevante en la legislatura. El primer punto a tocar es un tuit del Diputado Paul Ospital, el joven diputado de la bancada revolucionaria, subió una imagen a su red social donde ponía, primero, una planta de marihuana, lo cual deja entrever que está en favor de su uso lúdico y que, probablemente, podría tener un acierto en la legislatura si decide legislar en ese sentido; por otro lado, aparece también la foto del ex presidente Peña Nieto, lo que levantó mucho polvo entre los tuiteros.
Al respecto les comentaré que es triste que una foto de este estilo sea uno de las publicaciones más vistas de su red social, lejos de aclamar sus iniciativas, su trabajo o su habilidad de discurso (que siendo honestos, es buena), respondieron más a la controversia de su foto, lo cual es tristísimo (a menos que lo capitalice y comience a trabajar en una iniciativa cannabis), pues deja claro que no hay mucho trabajo del cual hablar.
Otra de las cosas que sucedieron esta semana, es la flamante publicación del Diputado Orihuela, de quien al estilo futbolero, cuando uno habla bien de él, se empeña en hacer todo lo contrario. Publicó un video con una idea que en lo general es buena (pero no única), donde anuncia que donará “todo su sueldo y su aguinaldo para aguinaldos para la gente”. Bueno pues como les decía, no es una idea novedosa pues antes que él, muchos diputados ya lo han hecho, sin embargo, los fines de donar dicho dinero son completamente sociales; comprar cobijas, comida, juguetes, etc., pero el Diputado va a usarlo para aguinaldos y es aquí donde cabe una pregunta: ¿La legislatura no les da aguinaldos para repartir?
Bueno, esperemos no se quede pobre con tantos aguinaldos. La verdad es que aún le quedan sus prerrogativas, dudo mucho que no le alcance para comprarse unos zapatos “Gucci”.
Por último, la declaración de la ex candidata a la Gubernatura del Estado por parte del Verde, Katia Reséndiz, quien declaro e hizo visible la violencia en razón de género de la que fue parte. De pronto hubo una gran cantidad de palabras de aliento y apoyo para ella, la misma ex candidata Wendy Barrera, dejó un pequeño pero contundente mensaje para Katia: “una imagen dice más que mil palabras, este es el inicio”, escribía en sus redes, lo cual deja pensando sobre lo que se viene o lo que se fragua.
Las posiciones y pensamientos son muy diversos, entre los que resaltan: “porqué hasta ahorita”, “que quiere lograr”, “solo quiere llamar atención”, y respecto de Wendy “no hizo nada”, “se sentó sin pelear”, “la callaron” y un largo etcétera.
Todos los pensamientos son libres de ataduras, las expresiones también, sin embargo nos estamos quedan muy cortos. No se trata de lo que quieran lograr (política o laboralmente hablando), no se trata de si se denuncia legal y procedimentalmente o no, no se debe pensar en que quieren llamar la atención, es más, ni si quiera sabemos la razón por la que Wendy tomó la decisión de no seguir haciendo público su tema (que muchos sabemos que es no haber llegado a la diputación).
La cuestión aquí es dejar de normalizar esas situaciones que poco a poco han ido siendo más visibles (pero no lo suficiente). Todos los partidos tienen al menos una acusación (legal o no) sobre este tipo de violencia, algunos de ellos tienen incluso, integrantes que han sido juzgados o inscritos en un padrón de “violentadores”.
Dejemos las actitudes machistas y dejemos normalizar la violencia con esa clase de comentarios.
“Al final, todo sale”