AMLO, directamente responsable de los conflictos que ha generado la desacreditada consulta de “revocación de mandato”. Desde un inicio, ha vituperado y vapuleado al árbitro de la contienda.
El tema constitucional se discute en todos los ámbitos, pasando por el político, el jurídico, el constitucional, el penal y el social. La sociedad civil totalmente en contra de quienes sin razón alguna fustigan al INE, árbitro de la contienda. Mientras, los sin razón defienden las barbajanadas del presidente de la República y sus esbirros.
El tema también se discutirá el la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, sobre la serie de “cochinadas” que ha cometido el ejército que movilizó Morena para la recolección de firmas. En las primeras firmas de “solicitantes de la consulta”, se encontró demasiada basura, por lo que se han tenido que desechar rúbricas apócrifas ¿Y el castigo para los fraudulentos de la democracia participativa?
En la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la que se encuentra de vacaciones, vía segundo receso del 2021, quedaron pendientes de resolver asuntos de trascendencia. Para los ministros no corre prisa la impartición de justicia. Mientras que las ministras que cubren la “guardia de AMLO”, simplemente conceden todo lo que ellos piden para que el INE se entrampe en el ejercicio del operativo que requiere movilizar miles de ciudadanos para instalar más de 161 mil casillas en todo el territorio nacional.
Solícitas las ministras de guardia concedieron la suspensión que solicitó el presidente de la Cámara de Diputados, el morenista Sergio Gutiérrez Luna, con la finalidad de no posponer acto alguno del proceso de “revocación de mandato”, argumentando que con los mil 503 millones de pesos suponen viabilidad financiera para el desarrollo del proceso. Sin datos que sustenten el criterio, a raja tabla deciden que el INE siga con los trabajos.
Olvidaron las señoras ministras que ese dinero es del mismo INE, quien hizo recortes a sus programas para alcanzar senda suma de dinero. Ignoraron que la Cámara de Diputados, con el beneplácito de AMLO, no dio un solo peso para los trabajos de la consulta. Viene a mi imaginación que las ministras vayan de compras y sin peso alguno en la bolsa, lleven dos carritos llenos de bienes en un supermercado y al salir no quieran pagar, bajo el fútil argumento de no tener dinero, pero ese no es problema, como tienen hambre piden les dejen llevar todos los objetos, aunque no tengan para pagar. Así imaginó a las ministras.
Sin mayor fundamento ni argumento de prueba, decidieron que el INE siga con los trabajos. Total, hay un artículo transitorio en la ley reglamentaria que les obliga, eso comentan, que no es mayor argumento legal. Precisamente ese artículo y otros más forman parte de la inconstitucionalidad que se ha planteado en la “tremenda Corte”.
El pasado 24 de diciembre llegó a la Sala Superior la última (hasta ese momento) de 8 impugnaciones. La organización morenista denominada “Que siga la Democracia”, se duele de la sanción por haber presentado firmas apócrifas. El pretexto, es entretener a los magistrados en el tema de la “revocación de mandato” ¡La campal lucha sin tregua!
Mientras tanto, el INE continúa con los preparativos de los procesos electorales del 2022 que se llevarán a cabo en seis Estados.
Sin dejar de trabajar en la revisión de las firmas en papel y electrónicas que morenistas presentaron para obligar a la inútil consulta que costará miles de millones de pesos; bueno, ya tiene un costo económico, dado que han tenido que contratar personal para que verifique detalladamente las firmas que, a más tardar el 3 de febrero deberán culminar con esa labor innecesaria.
¿Para qué piden la tullida consulta? Simplemente para que López Obrador continúe en el poder por lo que resta de su mandato. De ese tamaño es la manipulación de las huestes morenistas, todo porque AMLO quiere estar en campaña el año próximo.
El fin y capricho de López, es eminentemente político-electoral, temen perder las elecciones del 2024, de ahí su desesperación. Por lo pronto Ricardo Monreal Ávila, ha hecho un boquete, metiendo en problemas a las “corcholatas” de AMLO; la guerra sucia en su contra ha empezado por medio de audios que lo comprometen sentimentalmente con una mujer casada. Audio antiguo que los morenistas volvieron a revivir ¿Coincidencia? Claro que no, intentan acallar sus aspiraciones.
Héctor Parra Rodríguez