Lorenzo Córdova Vianello, vuelve y con justa razón, a denunciar al gobierno de la 4T, por medio de una conferencia que dio, sobre el acoso de que es objeto la autoridad electoral en México; conferencia que llamó: “Retos que enfrenta la autoridad electoral mexicana”.
La exposición fue organizada por el Centro Internacional Woodrow Wilson. Córdova recordaría en su plática que, aun cuando la democracia no se reduce sólo al tema electoral: es la base que permite su recreación. Académica y teóricamente le asiste la razón al presidente del Consejo General del INE; mucho más ahora que en el sentido práctico lo están viviendo a diario con los embates desde la Presidencia de la República.
El mensaje para los mexicanos no debe perderse de vista y evitar que ello suceda. Córdova Vianello aseguró “que los ataques a la institucionalidad electoral atentan directamente en contra del sistema democrático mexicano, ya que lo colocan en una situación de riesgo que debe ser atendida”. Pero ¿Quién debe atender el problema si es el mismo gobierno quien encabeza los atentados? El INE tiene el respaldo de la sociedad mexicana, no cabe duda de ello, pero carece de instrumentos legales coercitivos para brindar protección a la institución ciudadanizada, frente al poder público.
El presidente del Consejo General también afirmó: “Es cierto, la democracia no se reduce sólo a los procesos electorales, pero depende de ellos para convertirse en una realidad. Los procesos electorales, decía Ortega y Gasset, son el pequeño expediente técnico en que se sostiene todo el edifico democrático y es por eso que, si se ataca a las autoridades electorales, todo el sistema democrático está en peligro”.
¿En verdad está en peligro nuestro endeble sistema democrático como lo afirma el Dr. Córdova? Por supuesto que sí, el presidente López Obrador a toda costa pretende asumir las funciones de los tres Poderes Públicos y absorber el instrumento democrático que costó años levantar y fortalecer. Hacer autónomo el organismo público con participación ciudadana personal y directa en los procesos electorales. De ahí el prestigio internacional que ha merecido.
El Centro Internacional Woodrow Wilson convocó a las y los especialistas en la materia, quienes coincidieron en reconocer que el INE se ha logrado consolidar como una institución técnica de alto nivel y progresista en la regional y mundial, por lo que cuestionaron que en la actualidad pase por un gran estrés por el fuerte recorte presupuestal que enfrenta.
Ello apenas en una muestra del acoso intencional. Al carecer de dinero, le impiden ejercer sus atribuciones para luego poder culpar a quienes forman el organismo autónomo de los fracasos. El Estado tiene la obligación de dotar del presupuesto público suficiente para el cumplimiento eficiente y eficaz de las atribuciones de cualquier ente público. Al negarle recursos, se convierte en acoso, ataque directo para doblegarlo al poder del Estado. Así de simple es la ecuación.
Lorenzo Córdova hizo patente que el recorte presupuestal al Instituto de cara a la organización del inédito ejercicio de participación ciudadana que implica la Revocación de Mandato preocupa por el antecedente que puede suponer para la organización de futuros procesos electorales. De suyo preocupante la afirmación e interrogante del planteamiento del presidente del Consejo ¿Qué sucede si en las elecciones del 2024, el Estado no les da el presupuesto necesario para desarrollar el proceso de renovación de los Poderes Legislativo y ejecutivo? El caos. En las elecciones pasadas la delincuencia organizada metió mano y decidió
candidaturas y elecciones con la complacencia del presidente de la República ¿Qué viene después?
También lanzó la interrogante: “Lo que nos preocupa es que esto se puede volver una práctica común en contra de la integridad del sistema electoral y de cara a las elecciones más grandes que México tendrá en el 2024. Es un tema de sostenibilidad democrática y eso es lo que está en juego”. Sencilla la respuesta: AMLO y su pandilla quieren el control de las elecciones. Por eso el acoso, el hostigamiento y las amenazas cumplidas.
El conferencista certeramente abundó: “se encuentran las acusaciones en contra de la autoridad desde los circuitos gubernamentales; las amenazas y agresiones a funcionarios electorales, recortes presupuestales que pretenden minar la autonomía y una potencial reforma electoral encaminada a incrementar los controles gubernamentales” ¡Por supuesto! Controles gubernamentales, ese es el fin de AMLO y sus cuatreros.
Instituto Nacional Electoral, es referente a nivel regional y mundial con un modelo de vanguardia. Eso molesta al gobierno de la 4T.
La conferencia contó con los comentarios de Antonio Garrastazu, Director Regional para América Latina y el Caribe del Instituto Internacional Republicano, y de Deborah Ullmer, Directora Regional para América Latina y el Caribe del Instituto Nacional Demócrata. Todos coincidieron en la importancia que tiene el INE a nivel global como una de las instituciones de mayor innovación y prestigio. El representante del Instituto Internacional Republicano afirmó que, desde su creación, la autoridad electoral mexicana ha participado en al menos 93 misiones técnicas internacionales en 38 países donde se han organizado elecciones para intercambiar las experiencias que ha desarrollado a lo largo de su historia y que ha consolidado de forma exitosa. Solo AMLO y su camarilla no lo entienden ni lo reconocen.
La representante del Instituto Nacional Demócrata aseguró que: “el INE es un gran referente a nivel mundial y en especial para aquellas naciones que aspiran a obtener la confianza de sus ciudadanos en sus sistemas electorales y en sus instituciones, gracias al modelo de vanguardia con el que cuenta. Un modelo que busca la independencia, la imparcialidad y la profesionalización institucional que se complementa con funcionarios que, al no ser electos por el voto popular, garantizan que todas las corrientes políticas tengan voz y sus intereses sean considerados en todas las deliberaciones que se tienen” ¿Por qué el afán de AMLO de acabar con el INE de los mexicanos? Su obcecada obsesión por el autoritarismo.
Héctor Parra Rodríguez