Hace algunos meses trascendió la parálisis de la que adolecía el Registro Agrario Nacional en Querétaro. Ningún trámite para adelante ni para atrás, simplemente es como si el tiempo se hubiera detenido en esa oficina.
Que se siente intocable, dicen. Que ni el Gobernador pudo removerlo, presume. Que estará ahí hasta que acabe la gestión federal, se comenta. Y cómo no se va a sentir seguro si hasta su pariente, míster Plutarco García, le cuida las espaldas desde una Dirección del mismo RAN.
‘Haiga sido como haiga sido’, esa oficina federal continúa con largas filas de gente molesta porque sus títulos nomás no salen. Claro, siempre y cuando el gestor no sea Rutilio Vargas, porque a él, que es un gran especulador de la tierra, a él sí le dan pa’ adelante con sus asuntos.
La cerrazón es tal, que se ha argumentado el extravío de documentos para negar la inscripción de sentencias. Así las cosas. Pero don Isaías es muy honesto, porque es de los que están casados con la 4T y con los valores (¿?) que emanan desde el Palacio Nacional. Aunque si usted quiere que la maquinaria del RAN trabaje, podemos aceitar los engranaje$ para que el tramite avance. Porque así son los de la 4T, bien honestotes.
Dicho sea de paso, don Isaías anda muy activo con el senador, Gilberto Herrera, aperturando oficinas de la Coordinadora Nacional Ejidal y Comunal en el territorio, esa organización que busca hacerle contrapeso a la CNC. Su padrino en la localía es el exrector, que anda pateando la reja de cuanta persona se le pone enfrente.
La grilla y la administración (y el negocio) andan de la mano. Juntos y además revueltos.
Ahora sí ya le falta menos. Segunda llamada.