Ayer 28 de septiembre, Día de la Acción Global por un Aborto Legal y Seguro, se desarrollaron en Querétaro una serie de eventos que pusieron nuevamente el dedo en la llaga de la sociedad y de los entes públicos. Como punto central estuvo la demanda de la despenalización del aborto y, como otros temas satelitales pero no menos importantes, temas vinculados con la violencia en contra de la mujer, un gran pendiente sin duda.
De los 4 eventos de los que se tuvieron conocimiento, destacó uno: el convocado en Plaza Constitución por el colectivo Feminismo para Todas, mismo que encabeza la joven Diana Arlette Reséndiz Chávez. Y destacó no solo por la sobresaliente capacidad de convocatoria, sino por haber llevado acabo una protesta sin causar mayores estragos que algunas pintas y vidrios rotos. Hubo saldo blanco. Nada quemado, nada de lesionados, nada de riñas, nada de detenidas. Las participantes dieron sus testimonios y concluyeron con un concierto de rap.
Entre las diversas colectivas, Feminismo para Todas se consolida dentro del movimiento feminista por ser una organización que sabe tejer canales de comunicación adecuados y que comienza a fincar relaciones que pueden traerle más beneficios a las causas del movimiento que las tradicionales movilizaciones violentas. Le halló el caminito a esto de operar fino.
Hoy por hoy, la dinámica de las mujeres a nivel nacional y en Querétaro es, quizá, uno de los asuntos torales que permean en la vida pública, pues acusan una gran cantidad de pendientes que van desde la violencia física, pasando por la psicológica, hasta situaciones de brechas salariales y discriminación. Son problemáticas muy profundas.
El activismo de Reséndiz Chávez crece y con ello su movimiento