Tras varias visitas a México de los hombres del gabinete de seguridad del gobierno de Joe Bide, así como de la vicepresidenta Kamala Harris, por fin las partes llegaron a un acuerdo de entendimiento. Lo difícil será ponerlo en práctica, dada la displicencia del gobierno de AMLO, para combatir al crimen organizado, más parece ser protector de los delincuentes que de la sociedad mexicana.
Cambiaron los protagonistas, modificaron las reglas. Pusieron fin a la Iniciativa Mérida, para dar comienzo al llamado “Entendimiento Bicentenario”. Ambos gobiernos convinieron en trabajar sobre tres bases rectoras a fin de alcanzar, según el acuerdo, objetivos comunes en el combate a la delincuencia organizada de frente al año próximo.
Contrario a la política de los “abrazos y no balazos”, plantearon tres ejes de cooperación, acorde al nuevo pacto de cooperación, bajo reglas de corresponsabilidad en la materia enfocadas en la protección de las poblaciones de ambos países. Se comprometieron, sin fijar montos, porcentajes ni plazos, invertir en salud pública que se relaciona con la afectación en el consumo de drogas en ambos países. México considerado principal proveedor de drogas, tomando en cuenta los poderosos grupos de narco-delincuentes. Nada se dijo del hijo del Chapo ni de Nicolás Maduro. Silencio sepulcral.
Otro de los temas versó en que ambos países trabajarán en la prevención de la delincuencia transfronteriza asegurando modos de viaje y comercio, reduciendo el tráfico de armas, apuntando a las cadenas de suministro ilícitas y reduciendo el tráfico ilegal y trata de personas. Todo basado en las buenas intenciones, mientras el gobierno de la 4T, demandó a empresas fabricantes y vendedoras de armas de fuego, las que, por cierto, se sumaron para hacer un solo frente en contra del gobierno de AMLO. Pero, de este problema no se habló nada.
¿Desmantelación de las redes criminales? ¿Perseguir a las personas vinculadas a financiamientos ilícitos y fortaleciendo los sectores de la seguridad y la justicia? Este fue otro de los temas y acuerdo del nuevo convenio entre ambos países. El gobierno de López Obrador, no cumple ni cumplirá con este acuerdo. Primero, en lugar de fortalecer el sistema de justicia, lo que hace es debilitar al Poder Judicial Federal, siempre con la crítica por sus resoluciones. López es quien debiera estar en la cárcel al haber ordenado la libertad de un hombre que es reclamado por la justicia estadounidense ¿Fortalecer la seguridad? El mismo presidente rechazó la petición de un gobernador para fortalecer su sistema de seguridad ¿Para qué? Dijo AMLO, para que trabajen como lo hizo Tomás Cerón. El incorregible de López Obrador, jugando a la firma de un convenio que no cumplirá.
Acordaron como parte del pacto suscrito por ambas naciones, que: “Para enfrentar las complejas amenazas del siglo XXI, es necesario trabajar de manera coordinada, con una visión regional y un enfoque moderno de salud pública y desarrollo como parte de una estrategia de cooperación integral entre nuestros países”. También se comprometieron a: “Con
este marco de cooperación en materia de seguridad entre México y Estados Unidos, nos comprometemos a otorgar el máximo respeto por los derechos humanos, sin tolerancia a la corrupción”. Seguramente AMLO se “carcajeó a la vez que frunció el ceño de molestia. El gobierno de la 4T solapa y protege a los corruptos de su gobierno, mientras que pide al gobierno de Joe Biden, deje de apoyar económicamente a Ongs que investigan las corruptelas del gobierno de López Obrador. Hasta hoy el gobierno norteamericano ha ignorado la petición, precisamente va en contra de lo suscrito en el convenio ¡Ah que López tan torpe!
Plasmaron entre otros puntos del acuerdo que: “Estados Unidos tiene la intención de ampliar los esfuerzos para identificar, tratar y apoyar a las personas afectadas por los opioides ilícitos proporcionando asistencia financiera y técnica a los gobiernos estatales y locales de los Estados Unidos”. Bien por ellos ¿Y el gobierno de México? ¡Nada!
México casi llega a los 100 mil homicidios violentos en lo que va del gobierno de Andrés Manuel López, suscriptor del convenio en el que se comprometió a crear la “Red para la Prevención del Homicidio”, que proporcionará una plataforma para el intercambio de mejores prácticas en la prevención del crimen y la violencia, trabajará con jóvenes en riesgo y por comunidades seguras y pacíficas ¡Política ficción! AMLO no cumplirá, no quiere y no puede.
Probablemente pueda mejorar y abatir un poco la violencia que prometió bajar y no ha cumplido López Obrador, desde su campaña, dado que conformarán
un equipo multidisciplinario de fuerza de tarea sobre homicidios para la atención de delitos de alto impacto vinculados a organizaciones criminales transnacionales, con énfasis en el uso de laboratorios forenses, para facilitar y apoyar la investigación de crímenes y su enjuiciamiento. No especificaron cómo trabajará ese grupo multidisciplinario, luego se puede pensar que solo son buenos deseos de los EUA, aunque a López poco le interesa con su política de los “abrazos a los delincuentes”.
También se contempla combatir y fortalecer el control y la gestión de los envíos entrantes de precursores químicos, donde los chinos son los principales proveedores. Acuerdo políticos, dijeron: “Ambos países afirmamos nuestro compromiso de trabajar juntos, con respeto a nuestras soberanías, para combatir el tráfico de armas, coordinando bilateralmente las actividades de detección e incautación de armas, considerando nuevas estrategias y fortaleciendo nuestros esfuerzos colectivos” ¿Cómo? De eso nada.
Por último, también acordaron incrementar los esfuerzos de cooperación forense, que mucha falta le hace al gobierno de AMLO, para ayudar a resolver los miles de casos de desapariciones en México, en beneficio de las familias de las víctimas y en contra de la impunidad.
Bien por el acuerdo bilateral, bien por las pretensiones. Sin embargo, después de 3 largos años de un gobierno que ha probado en exceso su incapacidad y no tener el menor deseo de combatir todo lo que ha suscrito, difícil será que prospere. Veremos si los estadounidenses son capaces de presionar y destruir el contubernio que existe entre el gobierno de la 4T y la delincuencia organizada, acciones que de suyo ponen en riesgo la seguridad interna de los estadounidenses.
Héctor Parra Rodríguez
Twitter: @HectorParraRgz