SEIS AÑOS PERDIDOS EN FORTALECIMIENTO DE INFRAESTRUCTURA FEDERAL
En un país como el nuestro, de evidentes desigualdades, los programas sociales se convierten en instrumentos de justicia distributiva, no sólo son necesarios, son también eso, justos, sobre todo para los sectores de población más desfavorecidos.
Todo lo que se haga por robustecer esos programas con eficiencia en su administración y transparencia en su ejecución debe reconocerse. Sin embargo, la entrega de recursos, becas, subsidios e insumos para el campo, por ejemplo, no construyen ni dan mantenimiento a la infraestructura.
Se reconoce y se aplaude que el Gobierno Federal haya ampliado los presupuestos para programas sociales, pero ha renunciado a su responsabilidad de generar infraestructura de país. Es decir, de poco sirven las becas educativas si la infraestructura es deficiente o insuficiente para que más estudiantes puedan recibir educación.
La crítica, al menos para el caso de Querétaro, es que los programas sociales, aunque necesarios, no construyen ciudad, ni le dan mantenimiento a la infraestructura existente, igual de necesaria para todos.
Concluye el gobierno de Andrés Manuel López Obrador y en nuestro Estado no se ejecutó ningún proyecto de infraestructura de gran calado, ni uno en seis años. Como ejemplo de proyectos importantes financiados por la federación le recuerdo tres; con Vicente Fox se construyó el Aeropuerto Intercontinental, con Felipe Calderón el Sistema Acueducto II que hoy surte de agua potable a toda la Zona metropolitana de Querétaro y con Enrique Peña Nieto se hizo el Paseo de la República y el Macro Libramiento Palmillas-Apaseo ¿Cuál es la obra emblema del actual gobierno federal en la entidad? Ninguna. La federación renunció a su responsabilidad de construir infraestructura de país para los queretanos. Lamentable por donde se vea. Un sexenio perdido en materia de infraestructura federal para nuestro estado. Esperemos que los próximos seis, no sean bajo la misma tesitura.
NUEVA LEGISLATURA
En otro orden de ideas, lo que se vivió el día de hoy en la Sesión Solemne de instalación de la XLI Legislatura debe tener muy preocupado a más de uno, empezando por quien despacha en el Palacio de la Corregidora.
Se instaló la LXI Legislatura, las y los nuevos diputados locales rindieron la protesta de ley, pero por sus puras ganas, sin mediar explicación alguna, el decano de los diputados, el panista Antonio Zapata Guerrero decidió declarar un receso Legislativo hasta el miércoles 2 de octubre sin que se decidido la nueva mesa directiva, lo que enfureció, con razón, al bloque opositor, pues por primera vez en la historia, hay una Legislatura sin Mesa directiva.
La decisión del panista solo tiene una explicación, de ahí la preocupación en el Palacio de La Corregidora. Acción Nacional no tiene los votos necesarios para instalar una Mesa Directiva que pueda encabezar uno de los suyos, así de simple, pero así de grave.
Vaya usted a saber qué diablos estuvieron haciendo los principales operadores del panismo queretano para garantizar la mayoría simple al interior de la recién instalada cámara de diputados. Pero todo indica que no hicieron nada o se los chamaquearon de nuevo, lo que evidencia la incapacidad de negociación política de los nuevos diputados, pero si partimos del hecho de que el diputado decano, el más experimentado de entre los panistas y que condujo la sesión solemne se hizo bolas hasta con su toma de protesta, ya se imaginará como están los demás.
Se vienen tiempos difíciles para el Ejecutivo del Estado. En su propia cancha no tiene un negociador político eficiente y en la Legislatura, su partido no fue capaz de construir una mayoría simple. Menudo desgaste le espera al gobernador con esos operadores inoperantes, que prefirieron parar a la legislatura que acordar una mesa Directiva. ¿Qué pasara cuando tengan que discutir presupuesto, temas como el agua y la municipalización de territorios? ¿Se cerrarán de nuevo?
Morena fue contundente en su posicionamiento el día de hoy. Uno pensaría que la confrontación y las posiciones polarizantes entre poderes a nadie le convienen, empezando por los ciudadanos. Bueno, debería pensárselo muy bien, esas actitudes sí le benefician a Morena, un movimiento que vive del conflicto y la permanente polarización; Es su modus operandi, si no ganan, arrebatan
¿Hasta cuándo los panistas entenderán que así juega el otro equipo? ¿Hasta cuándo en el Palacio de La Corregidora entenderán que, si sus operadores no sirven para lidiar con una oposición leal, menos útiles le serán para lidiar con la oposición desleal que hoy tiene mayoría en la Legislatura del Estado? ¿Qué van a hacer los panistas, bloquear las sesiones cada vez que no tengan mayoría?
Para decirlo claro, si hoy Morena tiene mayoría es porque la construyeron, la trabajaron, convencieron a 13 de 25 diputados para armar un bloque opositor que parece sólido al menos para las decisiones de mayoría simple. Del otro lado, ni los panistas ni los operadores políticos (si acaso tiene) de quien despacha en 5 de Mayo y Pasteur hicieron su trabajo, les valió madre, para expresarlo en buen francés. No hay gobierno que aguante semejante desgaste. Al tiempo.
Y para ver si así lo entienden, cierro esta columna con la caracterización que el politólogo italiano Giovanni Sartori hace de la oposición desleal: florece en situaciones de crisis, que normalmente son muy onerosas para las instituciones democráticas (y para los gobiernos, agrego yo), en las que los partidos antisistema (algo que morena siempre ha sido) recurren a la exacerbación de los antagonismos de un electorado temeroso, frustrado, ansioso o impaciente. Ni el PAN ni el gobierno habían tenido que lidiar con una oposición desleal que hoy encuentra en Querétaro el escenario ideal para la exacerbación de esos antagonismos.
Hoy es tiempo de que se vea que el PAN gobierno y el PAN legislativo tienen operadores de alto nivel, que se vea que el panismo es capaz de sortear los peores escenarios, de construir acuerdos a pesar de la polarización, es tiempo de que den señales reales -no solo en discurso -de que pueden ganar el 2027 y mantener Querétaro, se requiere capacidad en sus operadores y menos miedo a la “ola 4T”, o de plano que sigan durmiendo y dejando que una niña mimada fije el posicionamiento del partido en el gobierno, evidenciando más dudas que certezas para el cierre del sexenio panista.