Por segunda vez el senador Germán Martínez, se sacude de la mesa en que había sido colocado para dejar de ser “florero”.
La primera fue en el IMSS, cuando la señora Buenrostro, entonces “jefa de compras” de la Secretaría de Hacienda, por instrucciones de López Obrador, se quedó con la facultad de decidir las adquisiciones consolidadas de medicamentos, así como la contratación y despido del personal. Razón que lo obligó a renunciar de la dirección general del IMSS e inauguró la frase: “no seré florero”.
Martínez, sin embargo, la tuvo cómoda, se regresó al Senado de la República, siempre alineándose a la política de López Obrador; donde hoy (hasta el lunes) ocupaba una curul de Morena, aunque siempre se ha dicho que no es morenista. Pero, Germán siguió siendo “florero”, solo cambió de mesa. En esta ocasión pasó a ser adorno de Ricardo Monreal, quien en su calidad de coordinador de la bancada morenista decide por encima de todos los senadores del grupo. Esta vez sí ¡Renunció ser florero de cualquier mesa!
Todo indica que ahora sí se “declaró independiente”, aunque Martínez no acepta el término de independiente, prefiere la denominación de “grupo parlamentario plural”, dado que, esta vez no formarán parte de ningún grupo partidario; antes lo fue del PAN, después de Morena. Debo destacar, al igual que lo hiciera cuando dejó el IMSS, no se confronta con López Obrador, aunque señala algunas diferencias, aquellas que llevan a la inicua confrontación social.
Germán acepta que no les asiste la legalidad al formar el “grupo parlamentario plural”; pero sí les respalda la Constitución. En entrevista radiofónica recordó una sentencia dictada por la Corte, cuando la hoy presidenta del Senado, Olga Sánchez Cordero, fungía como ministra; hoy presidenta de la Mesa Directiva del Senado, quien ahora establece un criterio contrario a la sentencia que dictó entonces, todo por no darle entrada al nuevo grupo en el senado que merma los votos cautivos de Morena; Sánchez
adelantó que, a los “disidentes” no les asiste la razón legal, aunque desdeñó la constitucional; la inexperta de Olga Sánchez, sin embargo, también fue “florero” en la Secretaría de Gobernación, hasta que la desechó López Obrador, la sumisa adelanta lo que no ha dicho su coordinador.
Tres de los 5 senadores eran cautivos de Morena. El coordinador Ricardo Monreal ya no podrá disponer caprichosamente de ellos; dos senadoras del PT y el senador Germán Martínez. En tanto que el PAN, ya no contará a pie juntillas con el voto de Gustavo Madero, aunque sigue siendo panista.
Con registro o sin registro en la Jucopo, el bloque de los cinco senadores, podrá decidir cualquier votación, siempre y cuando se mantengan unidos.
Conforme a transcurrido el tiempo, a López Obrador se le han complicado las cosas en ambas Cámaras legislativas. Cada vez se ve más crítico el pase automático, sin “moverle una coma” a las iniciativas de reforma a la Constitución. Las cuentas alegres que llegó a comentar en las mañaneras el presidente de la República, al sumar unos cuantos legisladores del PRI, no le cuadran.
En tanto en la Cámara de Diputados, legisladoras y legisladores de Morena se conflictúan por acaparar las presidencias y secretarías de las 20 comisiones que les corresponden en la LXV Legislatura federal. Descartan rebeliones; pero, Sergio Gutiérrez Luna, presidente de la Mesa Directiva (morenista) e Ignacio Mier Velazco coordinador de los diputados de Morena, muestran nerviosismo, preocupación, sin duda les afectó la escisión de los senadores.
Héctor Parra Rodríguez
Twitter: @HectorParraRgz
Germán Martínez es un hombre que se advierte que traiciona a quien le brinda apoyo cuando no lo invitan para ser protagonista de lo que sea.
Primeramente se le “voltea” PAN, después MORENA, ahora con un club de 4 amig@s para dar la nota.
Un personaje así no genera credibilidad, además sus discursos son estructurados de forma odiosa, falsa y pretenciosa.
En términos coloquiales: Germán Mtnz es un “chaquetero mercenario de la política”.