¿Se acuerdan de aquél movimiento ramplón que surgió “naturalmente” y abogaba por una verdadera ley de aguas? Pues terminó hundiéndose junto con sus “ideales”. Protestas, páginas de Faecebook, hashtags en Twitter que nomás servían para hacer ruido en medio de la nada. Se llaman REDAVI, algo así.
Estas huestes del senador morenista Gilberto Herrera están tan debilitados que buscan treparse a cualquier palo para ver si alguien los topa. Fue el caso de la marcha que realizaron los estudiantes de la UAQ el pasado viernes 14 de octubre. Vieron burro y quisieron aprovechar el viaje. Solo llegaron 9 de sus miembros, abrieron su manta y desfilaron a lado de los muchachos, que fue más bien en la retaguardia porque hasta allá los mandaron. Los alumnos no les dieron mucho crédito y los miraron como meros oportunistas, así que les dieron su justo lugar: hasta atrás.
Y por si fuera poco hasta se dieron el lujo de agredir y gritonear. Su miembro más destacado, una joven de nombre Alejandra Sánchez, “encaraba” a quien se le pusiera de frente.
Hasta se ven mal.