Honor a quien honor merece. Aunque duró menos de 1 mes colaborando en el Instituto Queretano de las Mujeres, la mente detrás de la propuesta de convertir al Instituto en un ente certificador para obtener más recursos es una politóloga a la que un grupúsculo interno tronó por considerarla una “inexperta”. Enhorabuena por haber impulsado la idea; Kuri Lorenzo la sabrá llevar a buen puerto.
Feria Ganadera. “¡Uy, qué emoción!”…ya fue anunciada la Feria Ganadera 2023, esa que todos los años trae siempre los mismos puestos de comida, los mismos juegos, los mismos locales de venta de lentes, cinturones, sombreros, juguitos sospechosos, etc., el mismo tráfico para entrar y salir, pero eso sí, cada vez más cara. ¿No tienen nada nuevo que ofrecer? Ya ni Alejandro Fernández es novedad en el Palenque. Y ya me imagino el Teatro del Pueblo, con un “cartelazo”…ajá. Cuatro meses para innovar; suerte.
En calle. Discreta pero efectiva, Guadalupe Murguía mantiene operación pecho-tierra, acercándose a grupos y escuchando de primera mano todas las áreas de oportunidad. Conocedora del reto que enfrenta, aplicará su experiencia en lo venidero. Tampoco inventa fórmulas ni descubre hilos negros, simplemente hace lo que le corresponde. Tiene el pulso de los líos de inseguridad y del tema de los servicios públicos, lo básico que le toca a un municipio. Está lista para el reto.
USEBEQ. Hace un par de meses se habló en este espacio de un caso de bullying en un preescolar de Santa Rosa Jáuregui llamado Enrique Rébsamen, y del que se presumió en aquella ocasión que ya se atendía…pero parece que todo quedará en una historia más de injusticia. Las evidentes situaciones de omisión tienen cara de que quedarán en el limbo, pues de la investigación se sabe lo mismo que sabemos del chupacabras o de los extraterrestres: nada.
Firmas. Todas las estructuras andan operando para conseguir sí o sí un objetivo de firmas que les pidieron para el Frente Amplio Opositor. Con decirle que al líder de la capital le solicitaron gentilmente algo así como 57 mil apoyos, a los diputados locales 2 mil, a uno que otro comisionado 20 mil firmas, y así sucesivamente. Los operativos se quejan, pues dicen que ahora sí se mancharon con la exigencia de semejantes “metas”. El tiempo corre, tic-tac tic-tac.