Por ejercer con libertad constitucional su función de impartir justicia en la Suprema Corte de Justicia de la Nación, las y los 11 ministros enfrentan los ataques del Comandante de las Fuerzas Armadas de la Nación.
Un grupúsculo de agresivos morenistas hace eco de los llamados del Comandante a la violencia y escenifican la quema de la ministra con una imagen de cartón frente a Palacio Nacional, en el mitin convocado por el incitador. La furia desatada por el llamado a la violencia del Comandante Suprema: el Presidente de la República.
La ministra presidenta ha sido amenazada de muerte en las redes sociales, después de los ataques del Comandante López.
La masa informe de seguidores del Comandante, se han apostado cual guerrilleros fuera de las oficinas de la SCJN, en espera de agredir físicamente a la presidenta y ministros que han osado suspender la inconstitucional legislación que contiene la normatividad de los actos arbitrarios del “Plan B”. “Fuente ovejuna”.
El Comandante, sin pruebas en la mano, acusa a los ministros de ser parte de la “mafia del poder”, partidarios de la “oligarquía”. Otro llamado a sus fieles que los incita a la agresividad.
En conferencia de prensa mañanera del Comandante, se apersona un “pseudo periodista” que dijo ser “Pepe” Ramírez y conducir el programa llamado “El charro en vivo”. El sujeto, siguiendo la línea del linchamiento convocado por el Comandante, le pide a éste que presente una iniciativa para que ministros y jueces puedan ser enjuiciados. Otro ignorante al que le abren las puertas de la casa del Comandante, para proponer y exponer sandeces. Nadie escapa del imperio de la ley, nadie. Al menos en teoría. “Pepe” se apersonó para adherirse al clima de violencia convocado por el Comandante.
Esta vez no son actos de distracción mediática del Comandante. Dentro de sus planes autoritarios, está el firme propósito de deshacer al Poder Judicial Federal y convertirlo en títere de su colección.
Su afán de controlar todo y sumar a sus atribuciones la facultad de impartir justicia, no le alcanza para cometer un auto golpe de Estado que le permita sumar las 3 funciones de los Poderes Públicos, como lo hiciera su amigo peruano el izquierdoso de Pedro Castillo, cuando, por simple decreto del ejecutivo disolvió el Congreso de Perú. El mismo Congreso destituyó a sátrapa de Pedro Castillo, por haber cometido delito; hoy se encuentra tras las rejas. Ese sería el destino del Comandante quien no se atreve a correr la misma suerte.
Mientras todo este escenario de descomposición se desarrolla en los pasillos de Palacio Nacional, al Comandante se le muren quemados 39 migrantes, en los terrenos de su influencia. Como era de esperarse, el Comandante Supremo desliza su responsabilidad. La representación del escenario de oropel se le vino abajo, dejando al descubierto su nefasta política migratoria de terror.
Al Comandante nunca le preocupó que muchos de los migrantes murieran en el camino a manos de la delincuencia organizada; creía que no era su esfera de competencia. Evadiendo siempre la responsabilidad de brindar seguridad pública para todos. Metido en otros quehaceres de la farándula el Comandante.
Esta vez sí le llegó “la lumbre a los aparejos” al Comandante y como autor indirecto del incendio se sacude las cenizas de las llamas que quemaron y mataron a 39 migrantes, dejando heridos a más de una docena de aquellos que se encontraban en prisión; no es un albergue como debió de ser y cumplir. Mundialmente el Comandante dejó ver su fallida política de migración, acompañada de una cadena de violaciones a los derechos humanos de los vejados migrantes.
El Comandante no puede argumentar serendipia. Nada es al azar, nada ¿Acaso sufre de ataraxia o se hace el impávido?
Sus actos tienen consecuencias, aunque de momento las evade con singular cinismo.
En un futuro muy próximo seguramente encontrará las consecuencias. El Comandante nefelibato pronto dejó de soñar en la oda que le recetó la señora Layda Sansores, quien le dijo que era “hijo de los 4 puntos cardinales, hijo del rayo restaurador, hijo del maíz, el hombre que suele caminar en sandalias humildes, hombre que lleva 32 soles”.
Sin embargo, haciendo a un lado la oda al Comandante López, éste sigue siendo un peligro para México. El “hijo del maiz” del Comandante continúa destruyendo los cimientos de nuestra democracia, robando, mintiendo y traicionando.
Habrá que detenerlo en su loca carrera ¿Qué hace la oposición? Sería bueno denunciarlo ante la Corte Penal Internacional de la Haya. Aquellos se atrevieron a librar orden de arresto en contra de Vladimir Putin, poderoso presidente de Rusia.
Héctor Parra Rodríguez