Sin duda que los programas sociales de la 4T y las “magnas” obras de López Obrador, han sido tremendos yerros de administración pública. Contrario a ello, con beneficios políticos que le han permitido a Morena acaparar 16 gubernaturas y va por más; además de la mayoría numérica en ambas Cámaras.
La corrupción con sello distintivo en todos los programas y obras. Sin embargo, la mediatización que ha logrado AMLO, a través de sus constantes mentiras por medio de las conferencias mañaneras, ha logrado darle la vuelta y convertir esos yerros en triunfos políticos; aunque el presidente esté destruyendo la República Mexicana, la ignorancia, la fanaticada y la perversidad subsisten por sobre la lógica.
AMLO acumula 80 mentiras por conferencia, eso le ayuda a transformar los yerros en triunfos.
En todo ha fallado y a todo le saca provecho. La destrucción de la obra de lo que sería uno de los mejores aeropuertos del mundo, el de Texcoco, la bañó de corrupción. Todo fue mentira, campaña mediática.
Construyó otro aeropuerto a capricho, bajo el supuesto de que sería mejor y más económico. Resultó falso, el AIFA es un fracaso, las empresas de la aeronáutica comercial se niegan a utilizar el aeropuerto sin terminar. El precio inicial se incrementó en un 23%, más los 110 mil millones que aceptó AMLO haber perdido por la cancelación del aeropuerto de Texcoco. Gracias a sus mentiras, los neófitos en la materia se quedaron con la idea de que México tiene uno de los mejores aeropuertos del mundo. No hay vías de comunicación para acceder con facilidad. La obvia derrota convertida en triunfo mediático.
El pasado lunes AMLO se quejó del no pago de los créditos a la palabra que otorgara el frustrado Banco-Bienestar, otro de los estruendosos fracasos. El programa de “apoyo emergente por la pandemia”, fue utilizado clientelarmente, dinero a los que menos tienen, mientras que a las grandes empresas las dejó solas. Hacienda declaró que en este año pensaban recuperar 1,499 millones de pesos de la cartera vencida. Un millón 500 mil créditos como moneda de cambio, 25 mil pesos para cada uno.
Como no funcionó el Banco-Bienestar, ni lograron construir las 2,700 sucursales, mucho menos en los lugares más alejados y de mayor pobreza para entregar los obsequios de los “programas clientelares”, el presidente anunció que cambiará de manos el funcionamiento. En lo sucesivo será Telégrafos de México, quien se haga cargo. Telecom será convertida en Financiera para el Bienestar, así dispersarán los recursos que no pudo hacer el Banco-Bienestar. Otro fracaso del gobierno de AMLO.
¿Qué sucedió con el Instituto de Salud para el Bienestar? Más fracasos. Habiendo pulverizado el Seguro Popular, AMLO prometió brindar salud universal, con medicinas y atención gratuita ¿Cumplió? Claro que no. Ante las mentiras el presidente “injerta” su bienestar para la salud al IMSS y asunto resuelto. Ahora se llama IMSS-Bienestar. Con engaños logra salir avante de los tremendos yerros de su administración.
La refinería Dos Bocas, junto con la refinería que compraron en los EUA, Deer Park, serían la solución a los problemas de abasto de los combustibles. AMLO aseguró que México sería autosuficiente. Otra calentura más del presidente López Obrador. Consumieron 9 mil millones de dólares que, dijeron, costaría Dos Bocas y no terminaron la obra. Bloomberg asegura que la refinería se llevará 12 mil 500 millones de dólares. 8 veces más cara que Der Paqrk. Van por más dinero. Y la chatarra comprada en los Estados Unidos también salió más cara de lo anunciado, sin considerar el adeudo de mil millones de dólares que arrastra Deer Park, empresa de Shell. Centro de Investigación de Política Pública (IMCO) lo dio a conocer en enero pasado. La mediatización de las mentiras de AMLO ha hecho creer que México alcanzará la autosuficiencia en materia de combustibles, afirmación falsa, ya escasea el combustible en el norte del país. Además, Shell (empresa británica) no vendió la parte que produce los petroquímicos, parte de la empresa más valiosa, hecho que ocultaron en Pemex.
La lista de yerros continúa con los programas emblemáticos como Sembrando Vida, Jóvenes Construyendo el Futuro, las Universidades Benito Juárez o la obra del Tren Maya, etcétera.
Sin embargo, los yerros bañados de corrupción le han permitido a López Obrador, gracias a las 800 mentiras diarias en las mañanera, conservar una popularidad que arrastra a su partido y le da triunfos electorales. Los neófitos, corruptos y fanáticos siguen creyendo en las mentiras, lo cual ha sido suficiente para gobernar con verdades inexistentes.
Héctor Parra Rodríguez